Los boers, descendientes de holandeses emigrados al sur de África en el siglo XVII, que con el tiempo se constituyeron en una comunidad local autodefinida como africana, decidieron en el siglo XX realizar una nueva migración hacia otro territorio, lejano y desconocido: la Patagonia argentina, con la finalidad de reterritorializar tanto sus granjas como los principios de libertad y autonomía. Así, entre 1902 y 1908, arribaron numerosas familias para instalarse en las áridas tierras del sur, principalmente en la localidad de Comodoro Rivadavia y sus alrededores. Allí, la colectividad se integró al proyecto de Estado – Nación argentino, al igual que inmigrantes de otras procedencias, bajo el paradigma de inclusión de extranjeros como fuerza laboral agroproductora. Su religión Protestante Reformada fue la base espiritual y el modelo de acción que les permitió hasta el presente la preservación identitaria y la práctica de ideales que desde hacía siglos los primeros holandeses arribados al sur de África habían promovido.
Por: Mg. Eugenia Arduino
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Qué interesante! Una pregunta: qué evidencia existe para afirmar que la religión fue vital en la conservación de su lengua y su identidad?